
Son las 11 de la mañana y el centro de Ambato está congestionado como si se tratara de un día viernes normal antes del inicio de la emergencia sanitaria.
Los taxistas laboran según el número de la placa, salen porque ya no tienen para subsistir ya que el taxi es su único ingreso y esperan con ansia el día que le permite salir según su placa para empezar a laborar.
El sector bancario está lleno de clientes, las hileras doblan la calle Bolívar, esperando ingresar al Banco del Austro, Bolivariano, Internacional y Ban Ecuador. La nota buena es que hacen fila respetando la distancia con guantes y mascarilla.
En los supermercados, al ingreso aplican desinfectante en las manos y hacen el test de la temperatura para desechar algún sospechoso de COVID-19.
En la Cevallos, Bolívar, Sucre, Juan Benigno Vela y 12 de Noviembre el ritmo de los ambateños es normal, no parecería que estamos en cuarentena y que Ambato aún continúa y continuará una semana más con el Semáforo en Rojo.


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